Niños aprendiendo números, formas y colores con tarjetas.
Comparte risas, letras y momentos con amigos: cada vez que tocas una letra, todos en tu círculo ven el dibujo animado saltar en sus pantallas. Domina el abecedario juntos en reuniones, cumpleaños o videollamadas. Crea desafíos: ¿quién reconoce la ‘X’ antes que los demás? La educación se vuelve contagiosa cuando todos juegan.
